La entrega del mensaje de Kṛṣṇa a las gopīs
Cuando las gopīs vieron a Uddhava y observaron que sus rasgos eran casi iguales a los de Kṛṣṇa, concluyeron que era un gran devoto de Kṛṣṇa. Sus manos eran muy largas, y sus brazos eran como pétalos de una flor de loto. Estaba vestido con un atuendo de color amarillo, y llevaba una guirnalda de flores de loto. Su cara era muy hermosa. Habiendo alcanzado la liberación sārūpya y poseyendo por ello los mismos rasgos corporales que el Señor, Uddhava se veía casi como Kṛṣṇa. Durante la ausencia de Kṛṣṇa, las gopīs iban fielmente a visitar la casa de madre Yaśodā temprano por la mañana. Ellas sabían que Nanda Mahārāja y madre Yaśodā estaban siempre apesadumbrados, e hicieron que su primer deber fuera ir y ofrecerles sus respetos a las personalidades mayores más excelsas de Vṛndāvana. Viendo a los amigos de Kṛṣṇa, Nanda y Yaśodā recordaban al propio Kṛṣṇa y se complacían, y las gopīs también quedaban complacidas al ver a Nanda y a Yaśodā.
Cuando las gopīs vieron que Uddhava representaba a Kṛṣṇa aun en sus rasgos corporales, pensaron que él debía ser un alma completamente rendida a la Suprema Personalidad de Dios. Ellas empezaron a reflexionar: «¿Quién es este muchacho que es igual a Kṛṣṇa? Tiene los mismos ojos semejantes a pétalos de loto, la misma nariz respingona y la misma cara hermosa, y está sonriendo de la misma manera. En todos los aspectos se parece a Kṛṣṇa, Śyāmasundara, el hermoso muchacho oscuro. Incluso está vestido como Kṛṣṇa. ¿De dónde vino este muchacho? ¿Quién es la afortunada muchacha que lo tiene por esposo?». De esta manera ellas hablaban entre sí. Estaban muy ansiosas por saber acerca de él, y debido a que eran solo muchachas aldeanas sencillas, rodearon a Uddhava.
Cuando las gopīs supieron que Uddhava tenía un mensaje de Kṛṣṇa, se pusieron muy contentas y lo invitaron a un lugar apartado para que se sentara con ellas. Querían hablar con él muy libremente y no querían pasar vergüenza ante personas desconocidas. Empezaron a darle la bienvenida con palabras corteses y con una gran sumisión: «Sabemos que tú eres un asociado muy confidente de Kṛṣṇa, y que por ello te ha invitado a Vṛndāvana a consolar a Su padre y a Su madre. Sabemos bien que el afecto por la familia es algo muy fuerte. Aun grandes sabios que han adoptado la orden renunciante de la vida no pueden renunciar a los miembros de la familia. Es por ello que Kṛṣṇa te ha enviado donde Su padre y Su madre; además de eso, Él no tiene ningún otro interés en Vṛndāvana. Él está ahora en la ciudad. ¿Qué le puede importar la aldea de Vṛndāvana o los pastizales de las vacas? Estas cosas no son útiles en absoluto para Kṛṣṇa debido a que ahora es un hombre de ciudad.
«Ciertamente, Él no tiene nada que ver con las personas que no sean miembros de Su familia. ¿Por qué debería uno preocuparse por aquellas personas que están fuera de la familia, especial y específicamente por aquellas que ya están apegadas, debido a que son esposas de otros? Kṛṣṇa se interesa en ellas mientras haya una necesidad de complacencia, tal como los abejorros que tienen interés en las flores mientras quieren extraer la miel de ellas. Desde el punto de vista psicológico, es muy natural que a una prostituta no le importe su amante, tan pronto como este pierde su dinero. De forma similar, cuando los ciudadanos se dan cuenta de que un gobierno es incapaz de darles completa protección, abandonan el país. Un estudiante, después de terminar su educación, abandona su relación con el maestro y con la escuela. Un hombre rico, después de recibir el tributo de su adorador, lo abandona. Cuando la estación de las frutas se termina, los pájaros ya no están interesados en el árbol. Al terminar de comer en la casa de un lord, el invitado abandona su relación con el anfitrión. Después de un incendio del bosque, cuando hay escasez de pastos verdes, los venados y los otros animales abandonan el bosque. Y así un hombre, después de disfrutar de su amiga, abandona su conexión con ella». De esta manera, todas las gopīs empezaron a acusar a Kṛṣṇa indirectamente, citando muchos símiles.
Uddhava se dio cuenta de que todas las gopīs de Vṛndāvana estaban simplemente absortas, pensando en Kṛṣṇa y Sus actividades infantiles. Mientras hablaban con Uddhava de Kṛṣṇa, olvidaron todo lo referente a sus asuntos hogareños. Hasta se olvidaron de sí mismas a medida que su interés por Kṛṣṇa aumentaba cada vez más.
Una de las gopīs, Śrīmatī Rādhārāṇī, estaba tan absorta en pensamientos de Kṛṣṇa a causa de Su contacto personal con Él, que de hecho empezó a hablar con un abejorro que estaba volando por allí y que trataba de tocar Sus pies de loto. Mientras otra gopī hablaba con el mensajero de Kṛṣṇa, Uddhava, Śrīmatī Rādhārāṇī tomó el abejorro por un mensajero de Kṛṣṇa y comenzó a hablar con él de la siguiente manera: «Abejorro, estás acostumbrado a beber la miel de las flores, y por lo tanto has preferido ser un mensajero de Kṛṣṇa, quien es de tu misma naturaleza. He visto en tus bigotes el polvo rojo de kuṅkuma que estaba untado en la guirnalda de flores de Kṛṣṇa mientras Él apretaba el pecho de alguna muchacha que es Mi rival. Te sientes muy orgulloso de haber tocado esa flor, y tus bigotes se han vuelto rojizos. Has venido aquí con un mensaje para Mí. Estás ansioso de tocar Mis pies. Pero Mi querido abejorro, déjame advertirte: ¡no me toques! Yo no quiero ningún mensaje de tu amo, quien no merece confianza. Tú eres el sirviente indigno de confianza de un amo indigno de confianza».
Puede que Śrīmatī Rādhārāṇī se haya dirigido a propósito de manera sarcástica a ese abejorro con el objeto de criticar al mensajero Uddhava. Indirectamente Śrīmatī Rādhārāṇī no solo vio que los rasgos corporales de Uddhava se asemejaban a los de Kṛṣṇa, sino que lo veía como si fuera igual a Kṛṣṇa. De esta manera, Ella indicó que Uddhava eran tan poco digno de confianza como Kṛṣṇa Mismo. Śrīmatī Rādhārāṇī quería dar razones específicas de por qué no estaba satisfecha ni con Kṛṣṇa ni con Sus mensajeros.
Se dirigió al abejorro diciendo. «Tu amo, Kṛṣṇa, es de tu misma calaña. Tú te sientas en una flor y después de sacar un poco de miel, inmediatamente vuelas, te sientas en otra flor y la saboreas. Eres igual a tu amo Kṛṣṇa. Él nos dio la oportunidad de probar el contacto con Sus labios, y luego se fue del todo. También sé que la diosa de la fortuna, Lakṣmī, quien se encuentra siempre en medio de las flores de loto, está constantemente ocupada en el servicio de Kṛṣṇa. Pero no sé por qué ha quedado tan cautivada por Kṛṣṇa. Está apegada a Él a pesar de que conoce Su verdadero carácter. En lo que a nosotras se refiere, somos más inteligentes que la diosa de la fortuna. No vamos a seguir siendo engañadas por Kṛṣṇa ni por Sus mensajeros».
Según la opinión de los expertos, Lakṣmī, la diosa de la fortuna, es una expansión subordinada de Śrīmatī Rādhārāṇī. Así como Kṛṣṇa tiene numerosas expansiones de viṣṇu–murtis, así mismo Su potencia dadora de placer, Rādhārāṇī, también tiene innumerables expansiones de diosas de la fortuna. Por lo tanto, la diosa de la fortuna, Lakṣmījī, siempre está ansiosa de elevarse a la posición de las gopīs.
Śrīmatī Rādhārāṇī continuó: «Abejorro tonto, estás tratando de satisfacerme y de obtener una recompensa cantando las glorias de Kṛṣṇa, pero es un intento inútil. Estamos desprovistas de todas nuestras posesiones. Estamos lejos de nuestros hogares y familias. Nosotras conocemos muy bien a Kṛṣṇa. Sabemos de Él aun más que tú. Así que, cualquier cosa que inventes sobre Él, serán cuentos viejos para nosotras. Ahora Kṛṣṇa está en la ciudad y es mejor conocido como el amigo de Arjuna. Ahora tiene muchas amigas nuevas, y ellas sin duda estarán muy felices de tener Su compañía. Debido a que Kṛṣṇa satisfizo la sensación ardiente y lujuriosa de sus pechos, ellas ahora están felices. Si vas allá y glorificas a Kṛṣṇa, puede que ellas quieran recompensarte. Tan solo estás tratando de tranquilizarme con tu comportamiento adulador, y por lo tanto, has colocado tu cabeza bajo Mis pies. Pero conozco el truco que estás tratando de hacer. Sé que eres un mensajero que viene de parte de un gran tramposo, Kṛṣṇa. Así que, por favor, déjame.
«Sé bien que eres muy experto en reconciliar a dos adversarios, pero al mismo tiempo debes saber que no puedo depositar Mi confianza en ti ni en tu amo, Kṛṣṇa. Nosotras hemos abandonado nuestras familias, esposos, hijos y parientes, solamente por Kṛṣṇa, y aun así, Él no se sintió obligado por esto. Él nos ha dejado para siempre. ¿Piensas que podemos depositar nuestra fe en Él otra vez? Sabemos que Kṛṣṇa no puede estar mucho tiempo sin la compañía de mujeres jóvenes. Esa es Su naturaleza. Él está encontrando dificultades en Mathurā debido a que ya no está en la aldea entre inocentes pastorcillas de vacas. Se encuentra en la sociedad aristocrática, y le debe de estar resultando difícil hacer amistad con las jóvenes. A lo mejor has venido aquí para solicitar otra vez nuestra preferencia o para llevarnos allí. ¿Pero por qué Kṛṣṇa habría de esperar que nosotras fuéramos para allá? Él está muy adiestrado para seducir a todas las muchachas, no solamente de Vṛndāvana o de Mathurā, sino de todo el universo. Su sonrisa maravillosamente encantadora es tan atractiva, y el movimiento de Sus cejas tan hermoso, que puede llamar hacia Él a cualquier mujer de los planetas celestiales, intermedios o plutónicos. Mahā-Lakṣmī, la más grande de todas las diosas de la fortuna, también anhela rendirle algún servicio. En comparación con todas estas mujeres del universo, ¿qué somos nosotras? Somos muy insignificantes.
«Kṛṣṇa se jacta de muy magnánimo, y los grandes santos lo alaban. Sus habilidades podrían ser utilizadas perfectamente si solo nos otorga Su misericordia, pues nos ha pisoteado y olvidado. Pobre mensajero, tú eres tan solo un sirviente poco inteligente. No sabes mucho acerca de Kṛṣṇa, cuán ingrato y duro de corazón Él ha sido, no solamente en esta vida, sino también en Sus vidas previas. Todas hemos oído esto de nuestra abuela, Paurṇamāsī. Ella nos ha informado que Kṛṣṇa nació de una familia kṣatriya antes de este nacimiento, y era conocido como Rāmacandra. En ese nacimiento, en lugar de matar a Vāli, un enemigo de Su amigo, tal como lo haría un kṣatriya, lo mató como si fuera un cazador. Un cazador busca un escondite seguro y luego mata a un animal sin enfrentarlo. Así pues, el Señor Rāmacandra siendo un kṣatriya, debió haber luchado con Vāli cara a cara, pero instigado por Su amigo, lo mató estando escondido detrás de un árbol. De esta manera, se desvió de los principios religiosos de un kṣatriya. También estaba tan atraído por la belleza de Sītā, que convirtió a una mujer fea a Śūrpaṇakhā, la hermana de Rāvana, al cortar su nariz y sus orejas. Śūrpaṇakhā le propuso que tuviera una relación íntima con ella, y como kṣatriya debió haberla satisfecho. Pero fue tan egoísta que no pudo olvidar a Sītādevī, y convirtió a Śūrpaṇakhā en una mujer fea. Antes de este nacimiento como kṣatriya, nació como un niño brāhmaṇa conocido como Vāmanadeva y le pidió caridad a Bali Mahārāja. Bali Mahārāja era tan magnánimo que le dio todo lo que poseía, y aun así, Kṛṣṇa, como Vāmanadeva, lo arresto de forma ingrata como si fuera un cuervo, y lo envió al reino Pātāla. Nosotras conocemos bien a Kṛṣṇa, y sabemos lo ingrato que es. Pero el problema es el siguiente: a pesar de que es tan cruel y duro de corazón, nos es muy difícil dejar de hablar de Él. No solo somos incapaces de dejar estas conversaciones, sino que los grandes sabios y las personas santas también están ocupados en hablar de Él. Nosotras, las gopīs de Vṛndāvana, no queremos tener más amistad con ese muchacho negruzco, pero no sabemos cómo podremos dejar de recordar y hablar sobre Sus actividades».
Debido a que Kṛṣṇa es absoluto, Sus así llamadas actividades crueles son tan disfrutables como Sus actividades bondadosas. Las personas santas y los grandes devotos como las gopīs, no pueden renunciar a Kṛṣṇa bajo ninguna circunstancia. El Señor Caitanya por lo tanto rezó: «Kṛṣṇa, Tú eres libre e independiente en todo aspecto. Puedes abrazarme o aplastarme bajo Tus pies —lo que Tú quieras—. Puede que rompas Mi corazón al no permitirme verte en toda Mi vida, pero eres Mi único objeto de amor».
«En mi opinión —continuó Śrīmatī Rādhārāṇī—, uno no debe oír acerca de Kṛṣṇa, pues tan pronto como una gota del néctar de Sus actividades trascendentales se vierte en el oído, uno inmediatamente se eleva por encima de la plataforma de la dualidad, de la atracción y el rechazo. Completamente liberado de la atracción a los apegos materiales, uno abandona el apego a este mundo material, a la familia, al hogar, a la esposa, a los hijos y a todas las cosas que son queridas por todos en sentido material. Al encontrarse desprovisto de todo bien material, uno se vuelve infeliz y vuelve a sus familiares infelices. Luego vaga en busca de Kṛṣṇa, ya sea como ser humano o en otras especies de vida, incluso como pájaro. Es muy difícil comprender realmente a Kṛṣṇa, Su nombre, Su naturaleza, Su forma, Sus pasatiempos, Sus enseres y Su séquito».
Śrīmatī Rādhārāṇī continuó hablándole al mensajero negro de Kṛṣṇa: «Por favor, no hables más acerca de Kṛṣṇa. Es mejor hablar de otra cosa. Nosotras ya estamos condenadas, como las ciervas de manchas negras del bosque que son encantadas por la dulce vibración musical del cazador. De la misma forma, nosotras hemos sido hechizadas por las dulces palabras de Kṛṣṇa, y una y otra vez pensamos en los rayos de las uñas de los dedos de Sus pies. Nos estamos poniendo más y más ansiosas de tener Su compañía; por lo tanto te pido que no hables más acerca de Kṛṣṇa».
Esta conversación de Rādhārāṇī con el abejorro mensajero, y Su acusación en contra de Kṛṣṇa, y al mismo tiempo, Su incapacidad de dejar de hablar de Él, son síntomas del elevadísimo éxtasis trascendental llamado mahā-bhāva. La extática manifestación de mahā-bhāva solamente es posible en las personas de Rādhārāṇī y Sus asociadas. Los grandes ācāryas como Śrīla Rūpa Gosvāmī y Viśvanātha Cakravarti Ṭhākura han analizado estas conversaciones mahā-bhāva de Śrīmatī Rādhārāṇī, y han descrito diferentes sentimientos tales como: udghūrṇā, confusión, y jalpa-pratijalpa o el hablar de diferentes maneras. En Rādhārāṇī se observa la ciencia de ujjvala, o la más brillante joya de amor por Dios.
Mientras Rādhārāṇī hablaba con la abeja y la abeja volaba de aquí para allá, repentinamente desapareció de Su vista. Ella estaba llena de pesar debido a la separación de Kṛṣṇa, y estaba sintiendo éxtasis al hablar con la abeja. Pero tan pronto como la abeja desapareció, Ella se volvió casi loca, pensando que la abeja mensajera podría haber regresado donde Kṛṣṇa para informarle todo acerca de Su conversación en contra de Él. Ella pensó: «Kṛṣṇa debe de haberlo lamentado mucho al oírlo». Así pues, Ella estaba muy sobrecogida con otro tipo de éxtasis.
Mientras tanto, la abeja, que volaba de aquí para allá, apareció ante Ella otra vez. Ella pensó: «Kṛṣṇa todavía es bondadoso conmigo. A pesar de que el mensajero le llevó mensajes perturbadores, Él es tan bondadoso que ha enviado nuevamente a la abeja para que Me lleve donde Él». Śrīmatī Rādhārāṇī fue muy cuidadosa esta vez de no decir nada en contra de Kṛṣṇa. «Mi querido amigo, te doy la bienvenida —dijo Ella—. Kṛṣṇa es tan bondadoso, que te ha enviado de nuevo. Kṛṣṇa es tan bondadoso y afectuoso conmigo, que te ha enviado de vuelta, afortunadamente, a pesar de que le llevaste Mi mensaje que iba en contra de Él. Mi querido amigo, puedes pedirme cualquier cosa que desees. Te daré cualquier cosa debido a que eres tan bondadoso conmigo. Has venido para llevarme donde Kṛṣṇa debido a que Él no puede venir aquí. Él está rodeado por nuevas amigas, en Mathurā. Pero tú eres una criatura pequeña. ¿Cómo puedes llevarme allá? ¿Cómo podrás ayudarme a que me encuentre con Kṛṣṇa, si Él está descansando allí junto con la diosa de la fortuna, y la está abrazando contra Su pecho? No importa. Olvidemos todas estas cosas acerca de Mi ida allá o de mandarte a ti. Por favor, hazme saber cómo le va a Kṛṣṇa en Mathurā. Dime si todavía recuerda a Su padre adoptivo Nanda Mahārāja, a Su madre afectuosa, Yaśodā, a Sus amigos pastores de vacas, y a Sus pobres amigas como nosotras, las gopīs. Estoy segura de que Él debe de cantar de nosotras a veces. Nosotras le servimos como si fuéramos sirvientas, sin ninguna remuneración. ¿Hay alguna posibilidad de que Kṛṣṇa regrese nuevamente y pase Sus brazos alrededor de nosotras? Sus extremidades están siempre fragantes con el aroma de aguru. Por favor hazle todas estas preguntas a Kṛṣṇa».
Uddhava estaba parado cerca, y oyó a Rādhārāṇī hablando de esta manera, como si se hubiera vuelto casi loca por Kṛṣṇa. Él estaba excesivamente sorprendido de cómo las gopīs estaban acostumbradas a pensar en Kṛṣṇa constantemente con ese elevadísimo éxtasis de amor mahā-bhāva. Había traído un mensaje escrito de Kṛṣṇa, y ahora quería presentarlo ante las gopīs tan solo para tranquilizarlas. Él dijo: «Mis queridas gopīs, su misión en la vida humana es ahora un éxito. Ustedes todas son devotas maravillosas de la Suprema Personalidad de Dios; por lo tanto son dignas de ser adoradas por todo tipo de gente. Ustedes son adorables a todo lo largo de los tres mundos debido a que sus mentes están absortas de una forma maravillosa, pensando en Vāsudeva, Kṛṣṇa. Él es la meta de todo tipo de actividades piadosas y ejecuciones rituales, tales como dar caridad, seguir estrictamente la austeridad de hacer votos, someterse a severas penitencias y encender el fuego de sacrificio. Él es el propósito que hay detrás del canto de los diferentes mantras, de las lecturas de los Vedas, del control de los sentidos y de la concentración de la mente mediante la meditación. Estos son algunos de los muchos y diferentes procesos para lograr la autorrealización y alcanzar la perfección de la vida. Pero en realidad, ellos tan solo tienen por objeto el que uno comprenda a Kṛṣṇa y se acople al servicio amoroso trascendental de la Suprema Personalidad de Dios. Esa también es la última instrucción del Bhagavad-gītā: a pesar de que hay descripciones de los diferentes tipos de procesos para lograr la autorrealización, al final Kṛṣṇa recomendó que uno debe abandonar todo y simplemente rendirse a Él. Todos los otros procesos están destinados a enseñarle a uno cómo rendirse por último a los pies de loto de Kṛṣṇa. El Bhagavad-gītā también dice que este proceso de rendición es culminado por una persona sincera después de ejecutar durante muchos nacimientos, los procesos de autorrealización con sabiduría y austeridad».
Debido a que la perfección de dicha austeridad se manifestó por completo en la vida de las gopīs, Uddhava estaba plenamente satisfecho al ver la posición trascendental de ellas. Él continuó diciendo: «Mis queridas gopīs, la mentalidad que ustedes han desarrollado en relación con Kṛṣṇa es muy, muy difícil de obtener, aun para los grandes sabios y para las personas santas. Ustedes han alcanzado el más alto estado de perfección de la vida. Es una gran bendición para ustedes el que hayan fijado su mente en Kṛṣṇa y hayan decidido tener a Kṛṣṇa solamente, abandonando su familia, hogar, parientes, esposos e hijos por la Suprema Personalidad. Debido a que sus mentes están ahora plenamente absortas en Kṛṣṇa, el Alma Suprema, el amor universal se ha desarrollado automáticamente en ustedes. Pienso que soy muy afortunado de haber sido favorecido, por la gracia de ustedes, con la oportunidad de verlas en esta situación».
Cuando Uddhava dijo que tenía un mensaje de Kṛṣṇa, las gopīs se mostraron más interesadas en oír el mensaje, que en oír acerca de su excelsa posición. A ellas no les gustaba mucho el hecho de que se les estuviera alabando por su elevada posición. Mostraron su ansiedad por oír el mensaje que Uddhava había traído de Kṛṣṇa. Uddhava dijo: «Mis queridas gopīs, he sido delegado especialmente para traerles este mensaje a ustedes, que son devotas tan excelsas y sencillas. Kṛṣṇa específicamente me envió a mí ante ustedes debido a que soy Su más confidente servidor».
Uddhava no les entrego a las gopīs el mensaje escrito que trajo de Kṛṣṇa, sino que personalmente lo leyó ante ellas. El mensaje estaba escrito de forma muy grave, para que no solamente las gopīs, sino todo filósofo empírico, pudiera entender cómo el amor puro de Dios está intrínsecamente integrado con todas las diferentes energías del Señor Supremo. De la información védica se concluye que el Señor Supremo tiene múltiples energías: parāsya śaktir vividhaiva śrūyate. También, las gopīs eran amigas tan íntimas y personales de Kṛṣṇa, que mientras Él escribía el mensaje para ellas, se conmovió mucho y no pudo escribir claramente. Uddhava, como estudiante de Bṛhaspati, tenía una inteligencia muy aguda, así que en lugar de entregar el mensaje escrito, pensó que era prudente leerlo personalmente y explicárselo a ellas.
Uddhava continuó: «Estas son las palabras de la Personalidad de Dios: “Mis queridas gopīs, Mis queridas amigas, por favor sepan que la separación entre nosotros no es posible en ningún tiempo, en ningún lugar ni bajo ninguna circunstancia, debido a que soy aquel que todo lo penetra”».
El Bhagavad-gītā explica esta característica omnipresente de Kṛṣṇa, tanto en el noveno como en el capítulo séptimo. Kṛṣṇa, en Su aspecto impersonal, es omnipresente; todo descansa en Él y lo sostiene Él, pero Él no está personalmente presente en todas partes. También en el capítulo séptimo, se afirma que los cinco elementos burdos —tierra, agua, fuego, aire y cielo— y los tres elementos sutiles —mente, inteligencia y ego— son todos Sus energías inferiores. Pero hay otra energía superior, que se llama la entidad viviente. Las entidades vivientes son también directamente partes integrales de Kṛṣṇa. Por lo tanto, Kṛṣṇa es la fuente de ambas energías: la material y la espiritual. Él está siempre entremezclado con todo como la causa y el efecto. No solamente las gopīs, sino toda entidad viviente está siempre conectada de manera inseparable con Kṛṣṇa en toda circunstancia. Sin embargo, en su relación con Kṛṣṇa, las gopīs cooperan perfecta y completamente, mientras que las entidades vivientes que se encuentran bajo el embrujo de māyā, se olvidan de Kṛṣṇa. Ellas se creen entidades separadas, sin conexión alguna con Kṛṣṇa.
Por lo tanto, el amor por Kṛṣṇa, o conciencia de Kṛṣṇa, es el estado de perfección del verdadero conocimiento, en lo que se refiere a comprender las cosas tal como son. Nuestras mentes nunca pueden estar vacías. La mente está constantemente ocupada con algún tipo de pensamiento, y el tema de ese pensamiento no puede estar aparte de los ocho elementos de la energía de Kṛṣṇa. Aquel que conoce este aspecto filosófico de todo pensamiento, es en realidad un hombre sabio, y se rinde a Kṛṣṇa. Las gopīs son el ejemplo típico de este estado de perfección del conocimiento. Ellas no son simples especuladoras mentales. Sus mentes están siempre absortas en Kṛṣṇa. La mente es tan solo la energía de Kṛṣṇa. En realidad, cualquier persona que pueda pensar, sentir, actuar y desear, no puede separarse de Kṛṣṇa. Pero el estado en el cual puede comprender su eterna relación, se llama conciencia de Kṛṣṇa. La condición enferma en la cual no puede comprender su eterna relación con Kṛṣṇa, es el estado contaminado, o māyā. Debido a que las gopīs se encuentran en la plataforma del conocimiento puro y trascendental, sus mentes están siempre llenas de conciencia de Kṛṣṇa. Por ejemplo, así como no hay separación entre el fuego y el aire, así mismo no hay separación entre Kṛṣṇa y las entidades vivientes. Cuando las entidades vivientes olvidan a Kṛṣṇa, no están en su condición normal. En lo que concierne a las gopīs, debido a que están siempre pensando en Kṛṣṇa, se encuentran situadas en el estado absoluto de la perfección del conocimiento. Los así llamados filósofos empíricos, algunas veces piensan que el sendero del bhakti está destinado a aquellos que tienen poca inteligencia, pero a menos que el así llamado hombre de conocimiento alcance la plataforma de bhakti, su conocimiento ciertamente es impuro e imperfecto. En realidad, el estado en el que se perfecciona la relación eterna de uno con Kṛṣṇa es aquel en el que se experimenta el amor de la separación. Pero eso también es ilusorio, debido a que no hay separación. Las gopīs nunca estuvieron separadas de Kṛṣṇa. Aun desde el punto de vista filosófico, nunca hubo separación.
La manifestación cósmica tampoco está separada de Kṛṣṇa. «Nada se encuentra separado de Mí; la totalidad de la manifestación cósmica descansa en Mí y no está separada de Mí. Yo existía antes de la creación». Esto se confirma en la literatura védica: antes de la creación, tan solo existía Nārāyaṇa. No existían ni Brahmā ni Śiva como asistentes. Las tres modalidades de la naturaleza material manipulan la totalidad de la manifestación cósmica. Brahmā es la encarnación de la cualidad de la pasión. Se dice que Brahmā creó este universo, pero Brahmā es el creador secundario; el creador original es Nārāyaṇa. Esto también lo confirma Śaṅkarācārya, nārāyaṇaḥ paro´vyaktāt: Nārāyaṇa es trascendental; está más allá de esta creación cósmica.
Kṛṣṇa crea, mantiene y aniquila la manifestación cósmica total, expandiéndose en diferentes encarnaciones. Todo es Kṛṣṇa, y todo depende de Kṛṣṇa, pero a Él no se le percibe en la energía material. La energía material se llama māyā o ilusión. En la energía espiritual, sin embargo, a Kṛṣṇa se le percibe a cada paso, en toda circunstancia. Este estado perfecto de entendimiento está presente en las gopīs. Así como Kṛṣṇa está siempre por encima de la manifestación cósmica, si bien esta depende completamente de Él, de la misma forma, una entidad viviente se encuentra también apartada por completo de su vida material condicionada. El cuerpo material se ha desarrollado en base a la existencia espiritual. En el Bhagavad-gītā, la totalidad de la manifestación cósmica se acepta como la madre de las entidades vivientes, y Kṛṣṇa es el padre. Así como el padre fecunda a la madre inyectando a la entidad viviente dentro del vientre, así mismo, Kṛṣṇa inyecta a todas las entidades vivientes en el vientre de la naturaleza material. Ellas salen en diferentes cuerpos de acuerdo con sus diferentes actividades fruitivas. En toda circunstancia, la entidad viviente está apartada de esta vida material condicionada.
Si simplemente estudiamos nuestros propios cuerpos, podremos comprender cómo la entidad viviente está siempre apartada de este enjaulamiento corporal. Toda acción del cuerpo se lleva a cabo por la interacción de las tres modalidades de la naturaleza material. Podemos ver que en todo momento se llevan a cabo muchos cambios en los cuerpos, pero el alma espiritual está apartada de todos esos cambios. Uno no puede crear, ni aniquilar, ni interponerse en las acciones de la naturaleza material. Por lo tanto, la entidad viviente está atrapada en el cuerpo material, y está condicionada en tres estados: mientras está despierta, dormida e inconsciente. La mente actúa a través de todas las tres condiciones de vida: la entidad viviente en su condición dormida o de sueño ve algo como si fuera real, y en su condición despierta ve la misma cosa como si fuera irreal. Se concluye, por lo tanto, que bajo ciertas circunstancias acepta algo como si fuera real, y bajo otras circunstancias acepta la misma cosa como si fuera irreal. Estos temas son materia de estudio para los filósofos empíricos o los sāṅkhya-yogīs. Para llegar a la conclusión correcta, los sāḥkhya-yogīs se someten a severas austeridades y penitencias. Ellos practican el control de los sentidos y la renunciación.
Todas estas diferentes formas de determinar cuál es la máxima meta de la vida, se asemejan a los ríos. Kṛṣṇa es el océano. Así como los ríos fluyen hacia el océano, todo intento por obtener conocimiento fluye hacia Kṛṣṇa. Después de esforzarse durante muchos, muchos nacimientos, cuando alguien realmente llega a Kṛṣṇa, alcanza el estado de perfección. Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā: «Todos se dedican al sendero por el cual llegan a comprenderme, pero aquellos que han adoptado rumbos sin ningún bhakti, encuentran su intento muy problemático». Kleśo´dhikataras teṣām: a Kṛṣṇa no se le puede comprender a menos que uno llegue al estado de bhakti.
El Gītā enuncia tres caminos: karma-yoga, jñāna-yoga y bhakti-yoga. A aquellos que son demasiado adictos a las actividades fruitivas, se les aconseja que ejecuten las acciones que los llevarán al bhakti. A aquellos que son adictos a la frustración producto de la filosofía empírica, también se les aconseja comprender el bhakti. El karma-yoga es diferente del karma ordinario, y el jñāna-yoga es diferente del jñāna. A fin de cuentas, tal como lo afirma el Señor en el Bhagavad-gītā, bhaktyā mām abhijānāti: solamente a través de la ejecución del servicio devocional, puede uno comprender a Kṛṣṇa. Las gopīs alcanzaron el estado de perfección del servicio devocional, debido a que no les importaba conocer nada que no fuera Kṛṣṇa. Se confirma en los Vedas: yasmin vijñāte sarvam evaṁ vijñātaṁ bhavati. Esto significa que simplemente por conocer a Kṛṣṇa, todo otro conocimiento se adquiere automáticamente.
Kṛṣṇa continuó: «El conocimiento trascendental del Absoluto ya no es necesario para ustedes. Ustedes se acostumbraron a amarme desde el mismo principio de sus vidas». El conocimiento de la Verdad Absoluta lo requieren, específicamente, las personas que desean la liberación de la existencia material. Pero aquel que ha alcanzado el amor por Kṛṣṇa, ya está en la plataforma de la liberación. Como se afirma en el Bhagavad-gītā: a cualquiera que esté ocupado en el servicio devocional puro, se le debe considerar situado en la plataforma trascendental de la liberación. En realidad las gopīs no sentían ningún dolor proveniente de la existencia material, sino que sentían la separación de Kṛṣṇa. Kṛṣṇa por lo tanto dijo: «Mis queridas gopīs, Me he separado de ustedes a propósito para incrementar su superexcelente amor por Mí. Hice esto para que ustedes pudieran meditar constantemente en Mí».
Las gopīs están en el estado perfecto de la meditación. Por lo general, los yogīs gustan más de la meditación que de la ejecución de servicio devocional para el Señor, pero no saben que el estado de perfección de la devoción es la obtención de la perfección del sistema de yoga. Se confirma en el Bhagavad-gītā que esta constante meditación de las gopīs en Kṛṣṇa es el yoga más elevado. Kṛṣṇa conocía muy bien la psicología de las mujeres. Cuando el amado de una mujer está lejos, ella piensa y medita en él, y él se hace presente ante ella. Kṛṣṇa quería enseñar a través del comportamiento de las gopīs. Aquel que está constantemente en trance como lo estaban las gopīs, alcanza con seguridad los pies de loto de Kṛṣṇa.
El Señor Caitanya le enseñó a la gente en general el método de vipralambha, que es el método de rendir servicio a la Suprema Personalidad de Dios con sentimientos de separación. Los Seis Gosvāmīs también enseñaron la adoración de Kṛṣṇa con los sentimientos de separación de las gopīs. Las oraciones de Śrīnivāsa Ācārya acerca de los Gosvāmīs explican estos temas muy claramente. Śrīnivāsa Ācārya dijo que los Gosvāmīs estaban siempre absortos en el océano de sentimientos trascendentales con el humor de las gopīs. Cuando vivían en Vṛndāvana, buscaban a Kṛṣṇa gritando: «¿Dónde está Kṛṣṇa? ¿Dónde están las gopīs? ¿Dónde estás Tú, Śrīmatī Rādhārāṇī?». Nunca dijeron: «Ahora hemos visto a Rādhā y a Kṛṣṇa, y por lo tanto nuestra misión está cumplida». Su misión permaneció siempre sin cumplir; ellos nunca encontraron a Rādhā ni a Kṛṣṇa.
En el momento de la danza rāsa, aquellas gopīs que no pudieron participar del rāsa-līlā con Kṛṣṇa, abandonaron sus cuerpos simplemente con pensar en Él. La absorción en conciencia de Kṛṣṇa con sentimientos de separación es, por lo tanto, el método más rápido para alcanzar los pies de loto de Kṛṣṇa. Por la afirmación personal de Kṛṣṇa, las gopīs se convencieron de la fuerza de los sentimientos de separación. Ellas estaban experimentando realmente el método sobrenatural de la adoración de Kṛṣṇa y estaban muy aliviadas y felices de poder comprenderlo.
Ellas empezaron a hablar de la siguiente manera: «Hemos oído que el rey Kaṁsa, que era siempre una fuente de problemas para la dinastía Yadu, ya ha sido muerto. Esta es una buena noticia para nosotras. Esperamos, por lo tanto, que los miembros de la dinastía Yadu estén muy felices en compañía de Kṛṣṇa quien puede complacer todos los deseos de Sus devotos. Mi querido Uddhava, por favor, haznos saber si Kṛṣṇa algunas veces piensa en nosotras mientras se encuentra en medio de las muy cultas muchachas de sociedad de Mathurā. Sabemos que las mujeres y las muchachas de Mathurā no son aldeanas. Ellas son cultas y hermosas. Sus miradas sonrientes y tímidas, y sus otras características femeninas, deben ser muy complacientes para Kṛṣṇa. Sabemos muy bien que a Kṛṣṇa siempre le gusta mucho el comportamiento de las mujeres hermosas. Parece, por lo tanto, que las mujeres de Mathurā lo han atrapado. Mi querido Uddhava, por favor, ¿podrías hacernos saber si Kṛṣṇa algunas veces nos recuerda mientras se encuentra en medio de otras mujeres?».
Otra gopī preguntó: «¿Recuerda Él la noche que pasamos en medio de las flores kumuda y la luz de la Luna, cuando Vṛndāvana se puso de lo más hermosa? Kṛṣṇa bailaba con nosotras, y la atmósfera estaba sobrecargada con el sonido de campanitas de pies. En aquel entonces, intercambiamos conversaciones placenteras. ¿Recuerda Él esa noche en particular? Nosotras recordamos esa noche y sentimos la separación. La separación de Kṛṣṇa nos agita, como si hubiera fuego en nuestros cuerpos. Él propuso regresar a Vṛndāvana a extinguir el fuego, así como una nube aparece en el cielo para extinguir el incendio del bosque con su fuerte lluvia».
Otra gopī dijo: «Kṛṣṇa ha matado a Su enemigo, y ha conseguido victoriosamente el reino de Kaṁsa. Quizás para este entonces ya esté casado con la hija de un rey viviendo muy felizmente entre sus familiares y amigos. Por lo tanto, ¿por qué habría de regresar a esta aldea de Vṛndāvana?».
Otra gopī dijo: «Kṛṣṇa es la Suprema Personalidad de Dios, el esposo de la diosa de la fortuna, y es autosuficiente. Él no tiene por qué estar con nosotras —las muchachas del bosque de Vṛndāvana— ni con las muchachas del mundo de Mathurā. Él es la gran Superalma; no tiene nada que ver con ninguna de nosotras, ni aquí ni allá».
Otra gopī dijo: «Es una esperanza sin sentido que esperemos que Kṛṣṇa regrese a Vṛndāvana. Nosotras, en vez de eso, deberíamos tratar de ser felices en la decepción. Aun Piṅgalā, la gran prostituta, dijo que la decepción es el más grande placer. Todas sabemos estas cosas, pero nos es muy difícil abandonar la expectación de que Kṛṣṇa regrese otra vez. ¿Quién puede olvidar tan siquiera una conversación con Kṛṣṇa, en cuyo pecho siempre permanece la diosa de la fortuna, a pesar de que Kṛṣṇa no la desea? Mi querido Uddhava, Vṛndāvana es la tierra de los ríos, de los bosques y de las vacas. Aquí se oye la vibración de la flauta, y Kṛṣṇa, junto con Su hermano mayor, Śrī Balarāma, disfrutaba de la atmósfera en nuestra compañía. Así pues, el medio ambiente de Vṛndāvana nos recuerda constantemente a Kṛṣṇa y a Balarāma. Sus huellas se encuentran en la tierra de Vṛndāvana, que es lugar donde reside la diosa de la fortuna, pero esos signos no pueden ayudarnos a conseguir a Kṛṣṇa».
Las gopīs además expresaron que Vṛndāvana estaba todavía llena de toda opulencia y buena fortuna; no había escasez ni necesidad en Vṛndāvana en lo que concernía a las necesidades materiales. Pero a pesar de esa opulencia, ellas no podían olvidar a Kṛṣṇa ni a Balarāma.
«Estamos constantemente recordando diversas características atractivas del hermoso Kṛṣṇa: Su manera de caminar, Su sonrisa y Sus palabras jocosas. Todas estamos perdidas a causa de los tratos de Kṛṣṇa, y es imposible que lo olvidemos. Siempre estamos rezando que Él regrese, exclamando: “¡Querido Señor, querido esposo de la diosa de la fortuna, querido Señor de Vṛndāvana y liberador de los devotos afligidos! Ahora nos encontramos caídas y sumergidas en un océano de aflicción. Por ello, por favor regresa otra vez a Vṛndāvana y libéranos de esta condición lamentable”».
Uddhava estudió minuciosamente la condición trascendentalmente anormal de las gopīs en su separación de Kṛṣṇa, y pensó que era prudente repetirles todos los pasatiempos de Śrī Kṛṣṇa una y otra vez. Las personas materialistas están siempre quemándose debido al fuego ardiente de las angustias materiales. Las gopīs también estaban quemándose en un fuego abrasador y trascendental a causa de la separación de Kṛṣṇa. Sin embargo, el fuego ardiente que exasperaba a las gopīs es diferente del fuego del mundo material. Las gopīs constantemente quieren la compañía de Kṛṣṇa, mientras que la persona materialista quiere gozar de las ventajas de las comodidades materiales.
Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura afirma que Kṛṣṇa salvó en un segundo a los pastorcillos de vacas del incendio abrasador del bosque, mientras sus ojos estaban cerrados. De forma similar, Uddhava les indicó a las gopīs que se podrían salvar del fuego de la separación cerrando los ojos y meditando en las actividades de Kṛṣṇa desde el mismo comienzo de su relación con Él. Externamente, las gopīs podían visualizar todos los pasatiempos de Kṛṣṇa, mediante el hecho de oír las descripciones de Uddhava, e internamente, podían recordar esos pasatiempos. Con la instrucción de Uddhava, las gopīs podían comprender que Kṛṣṇa no estaba separado de ellas. De la misma manera en que ellas estaban pensando constantemente en Kṛṣṇa, así Kṛṣṇa también pensaba en ellas constantemente mientras se encontraba en Mathurā.
Los mensajes e instrucciones de Uddhava salvaron a las gopīs de la muerte inmediata, y las gopīs reconocieron la bendición de Uddhava. Uddhava prácticamente actúo como el maestro espiritual preceptor de las gopīs, y ellas a cambio lo adoraron tal como hubieran adorado a Kṛṣṇa. Las Escrituras autoritativas recomiendan que se debe adorar al maestro espiritual al mismo nivel que a la Suprema Personalidad de Dios, debido a que es Su muy confidente servidor. Las grandes autoridades aceptan que el maestro espiritual es la manifestación externa de Kṛṣṇa. Las gopīs se aliviaron de su ardiente condición trascendental, al comprender que Kṛṣṇa estaba con ellas. Internamente, en sus corazones, recordaron su contacto con Él, y externamente Uddhava las ayudó a apreciar a Kṛṣṇa con instrucciones conclusivas.
Las Escrituras describen a la Suprema Personalidad de Dios como adhokṣaja, que indica que está más allá de la percepción de todos los sentidos materiales. A pesar de que está más allá de la percepción de los sentidos materiales, está presente en el corazón de todos. Al mismo tiempo, está presente en todas partes mediante Su aspecto omnipresente de Brahman. Todos los tres aspectos trascendentales de la Verdad Absoluta (Bhagavān —la Personalidad de Dios—, Paramātmā —la Superalma localizada—, y el Brahman omnipresente), pueden ser comprendidos y experimentados simplemente estudiando la condición de las gopīs en su encuentro con Uddhava, como lo describe el Śrīmad-Bhāgavatam.
Śrinivāsa Ācārya dijo que los Seis Gosvāmīs estaban siempre sumergidos en pensamientos de las actividades de las gopīs. Caitanya Mahāprabhu también ha recomendado como superexcelente el método de las gopīs para adorar a la Suprema Personalidad de Dios. Śrīla Śukadeva Gosvāmī también ha indicado que todo aquel que oiga de la fuente correcta acerca del trato de las gopīs con Kṛṣṇa y siga las instrucciones, será elevado a la máxima posición del servicio devocional y podrá abandonar la lujuria del disfrute material.
Todas las gopīs se consolaron con las instrucciones de Uddhava, y le pidieron que se quedara en Vṛndāvana por algunos días más. Uddhava accedió a su propuesta y permaneció con ellas no solamente por algunos días, sino por algunos meses. Siempre las mantuvo ocupadas en pensar en el mensaje trascendental de Kṛṣṇa y en Sus pasatiempos, y las gopīs se sentían como si estuvieran experimentando contacto directo con Kṛṣṇa. Mientras Uddhava permaneció en Vṛndāvana, los habitantes disfrutaron de su compañía. Mientras conversaban de las actividades de Kṛṣṇa, los días pasaron como si fueran momentos. La atmósfera natural de Vṛndāvana, con la presencia del río Yamunā, sus hermosos huertos de árboles adornados con diversas frutas, la colina Govardhana, las cuevas, las flores recién abiertas —todo se combinó para inspirar a Uddhava a narrar los pasatiempos de Kṛṣṇa—. Los habitantes disfrutaron de la compañía de Uddhava, de la misma manera en que disfrutaron de la compañía de Kṛṣṇa.
La actitud de las gopīs atraía a Uddhava porque ellas estaban apegadas por completo a Kṛṣṇa, y Uddhava se inspiró con la ansiedad que las gopīs sentían por Kṛṣṇa. El empezó a ofrecerles sus respetuosas reverencias, y compuso canciones en alabanza a sus cualidades trascendentales: «Entre todas las entidades vivientes que han aceptado la forma humana de vida, las gopīs han logrado el éxito en su misión, en forma muy excelente. Sus pensamientos están absortos por completo en los pies de loto de Kṛṣṇa. Los grandes sabios y las personas santas también están tratando de absorberse en la meditación en los pies de loto de Kṛṣṇa, quien es Mukunda Mismo, el dador de la liberación; pero las gopīs, habiendo aceptado amorosamente al Señor, están automáticamente acostumbradas a ese hábito. Ellas no dependen de ninguna práctica yóguica. Se concluye de esto que aquel que ha logrado obtener la condición de vida de las gopīs no tiene que nacer como el Señor Brahmā ni nacer de una familia brāhmaṇa ni ser iniciado como brāhmaṇa».
Śrī Uddhava confirmó la declaración del Bhagavad-gītā que el Señor Kṛṣṇa expuso: aquel que se refugia en Él con el propósito correcto, sea él un śūdra o más bajo, alcanzará la más alta meta de la vida. Las gopīs han marcado la pauta de la devoción para el mundo entero. Siguiendo los pasos de las gopīs al pensar constantemente en Kṛṣṇa, uno puede obtener el más elevado estado de perfección de la vida espiritual. Las gopīs no nacieron de una familia altamente culta; ellas nacieron de las familias de los pastores de vacas, y aun así, desarrollaron el más elevado amor por Kṛṣṇa. Para la autorrealización, o comprensión de Dios, no se requiere nacer de una familia elevada. Lo único que se requiere es el desarrollo extático de amor por Dios. Para alcanzar la perfección del proceso de la conciencia de Kṛṣṇa, no se necesita ningún otro requisito más que estar ocupado constantemente en el servicio amoroso de Kṛṣṇa. Kṛṣṇa es el supremo néctar, la fuente de todo placer. El efecto de dedicarse a desarrollar conciencia de Kṛṣṇa es tal como el de beber néctar: con o sin el conocimiento de uno, dará resultados. El principio activo de conciencia de Kṛṣṇa se manifestará por doquier; no importa cómo ni dónde uno haya nacido. Kṛṣṇa otorgará, sin duda alguna, Su bendición a cualquiera que desarrolle conciencia de Kṛṣṇa.
La bendición suprema que las gopīs alcanzaron, a pesar de haber nacido en las familias de pastores de vacas, nunca la logró ni siquiera la misma diosa de la fortuna, y ciertamente tampoco los habitantes del cielo, a pesar de que sus formas corporales son como los lotos. Las gopīs son tan afortunadas, que durante el rāsa-līlā, Kṛṣṇa personalmente las estrechó en Sus brazos. Kṛṣṇa las besó cara a cara. Ciertamente, ninguna mujer en los tres mundos puede lograr esto, a excepción de las gopīs.
Uddhava apreció la excelsa posición de las gopīs, y deseó postrarse y colocar el polvo de sus pies en su cabeza. Aun así, no se atrevió a pedirle a las gopīs que le ofrecieran el polvo de sus pies; quizás podrían no estar de acuerdo. Por lo tanto, deseó tener su cabeza untada con el polvo de los pies de las gopīs sin el conocimiento de ellas. Deseó convertirse solamente en un insignificante puñado de grama o de hierbas en la tierra de Vṛndāvana.
Las gopīs estaban tan atraídas a Kṛṣṇa, que cuando oyeron la vibración de Su flauta, instantáneamente abandonaron a sus familias, hijos, honor y timidez femenina, y corrieron hacia el lugar donde Kṛṣṇa estaba parado. No consideraron si estaban pasando por la carretera o a través de las selvas. De forma imperceptible, el polvo de sus pies le fue otorgado a la pequeña grama y a las hierbas de Vṛndāvana, No atreviéndose a colocar el polvo de los pies de las gopīs en su propia cabeza, Uddhava aspiró tener un futuro nacimiento en la posición de un puñado de grama y hierba. Él podría entonces obtener el polvo de los pies de las gopīs.
Uddhava apreció la fortuna extraordinaria de las gopīs, quienes se libraron de todo tipo de contaminación material al colocar en sus alzados y hermosos pechos los pies de loto de Kṛṣṇa, que no solamente son adorados por la diosa de la fortuna, sino por semidioses eminentes tales como Brahmā y el Señor Śiva, y en los cuales los yogīs meditan en sus corazones. Así pues, Uddhava deseó poder orar constantemente para ser honrado con el polvo de los pies de las gopīs. El canto de las gopīs acerca de los pasatiempos trascendentales del Señor Kṛṣṇa, se ha hecho célebre a lo largo de los tres mundos.
Después de vivir en Vṛndāvana por algunos días, Uddhava deseó regresar donde Kṛṣṇa, y le pidió permiso para partir a Nanda Mahārāja y a Yaśodā. Tuvo una reunión de despedida con las gopīs, y pidiéndoles también permiso a ellas, se montó en su cuadriga para partir hacia Mathurā.
Cuando Uddhava estaba por partir, todos los habitantes de Vṛndāvana, encabezados por Nanda Mahārāja y Yaśodā, fueron a decirle adiós, y le regalaron diversos tipos de valiosos artículos obtenidos en Vṛndāvana. Ellos le expresaron sus sentimientos con lágrimas en los ojos, provocadas por el intenso apego que sentían por Kṛṣṇa. Todos ellos deseaban las bendiciones de Uddhava. Deseaban siempre recordar las actividades gloriosas de Kṛṣṇa, y querían que sus mentes estuvieran siempre fijas en Sus pies de loto, que sus palabras siempre se ocuparan de glorificar a Kṛṣṇa, y que sus cuerpos siempre se ocuparan en postrarse y recordarlo a Él constantemente. Esta oración de los habitantes de Vṛndāvana constituye el tipo más excelente de autorrealización. El método es muy simple: fijar la mente siempre en los pies de loto de Kṛṣṇa, hablar siempre de Kṛṣṇa sin pasar a ningún otro tema, y ocupar el cuerpo constantemente en el servicio de Kṛṣṇa. Específicamente en esta forma humana de vida, uno debe ocupar su vida, sus recursos, palabras e inteligencia, al servicio del Señor. Solamente esas actividades pueden elevar al ser humano al más alto nivel de perfección. Este es el veredicto de todas las autoridades.
Los habitantes de Vṛndāvana dijeron: «Por la voluntad de la suprema autoridad, y de acuerdo con los resultados de nuestro propio trabajo, puede que nazcamos en cualquier parte. No importa dónde nazcamos, pero lo único que rogamos es que simplemente estemos ocupados en conciencia de Kṛṣṇa». Un devoto puro del Señor nunca desea ser promovido a los planetas celestiales, ni siquiera a Vaikuṇṭha ni a Goloka Vṛndāvana, porque no tiene deseo de su propia satisfacción personal. Un devoto puro considera que tanto el cielo como el infierno están en el mismo nivel. Sin Kṛṣṇa el cielo es un infierno; y con Kṛṣṇa el infierno es el cielo.
Cuando Uddhava había honrado suficientemente la adoración de los devotos puros de Vṛndāvana, regresó a Mathurā y a su amo Kṛṣṇa. Después de ofrecerles respetos, postrándose ante el Señor Kṛṣṇa y Balarāma, empezó a describir la maravillosa vida devocional de los habitantes de Vṛndāvana. Él les presentó a Vasudeva, el padre de Kṛṣṇa, y a Ugrasena, el abuelo de Kṛṣṇa, todos los regalos dados por los habitantes de Vṛndāvana.
Así termina el significado de Bhaktivedanta del capítulo cuadragésimo séptimo del libro Kṛṣṇa, titulado: «La entrega del mensaje de Kṛṣṇa a las gopīs».